Fin de la Historia
Se deshoja el pincel con que brindamos abrigo
a la acuarela de emociones que endulzaron los momentos.
Nada quedará del cuadernillo de memorias
que escribió tu boca con ademanes posesivos por mi cráneo,
hasta entonces saturado con polillas vestidas de sangre.
Esta es la hora en que destiñe la historia,
en la que se escurre como en el húmedo papel
que no quiere afrontar la tragedia en su destino,
la tragedia de todos los destinos,
la de su sentido, la tragedia:
Esa tragedia primera,
de la muerte que te alcanza de mil formas,
aquella muerte que danza en las coyunturas del mundo,
y pasa latente en los ojos del alma
dejando caer su guadaña
en tu historia, en la mía,
y en los sueños que jamás encontraron la luz.
Aquella tragedia segunda,
la impotencia ante el más fuerte
y más cobarde contrincante:
El misterio que derrota tus anhelos
sin jamás darte la cara:
El silencio eterno que azota las puertas de la razón
y el descorazonamiento en la materia soluble de la Verdad.
La frontera inagotable de tiempo y el espacio
rodeada de fantasmas y dioses pintados de ausencia
sobre rutas, fronteras y territorios en veda
por la infinitud y eternidad que no se sosiegan
en los cabos de mi mente.
Toda esta tragedia apilando la historia
que se va desmoronando como un monumento invisible,
enorme y frágil, pincelado por el viento.
Las historias avanzan y se extinguen
empeñando la conciencia a la nostalgia
y al deseo ante la ausencia.
Toda esa trágica rutina
grabada en la cinta que recorren nuestros pasos.
Fatiga del deseo ¡Hasta cuándo!
Memorias que se extinguen, momentos que se borran.
Un rostro fue más suave que toda la pureza y hoy
retorna a la memoria en el boceto de un papel amarillento.
¡Arrójenlo a la hoguera!
Que se queme con los mártires
que no alcanzaron sus sueños.
Hans Aranda
Hans Aranda
Este es el primer poema que publico en la Red, lo elegí pues trata temas muy relacionados a la cita que hice anteriormente sobre "El Necronauta". Más adelante publicaré uno que otro artículo, para que el contenido de este blog vaya adquiriendo más coherencia.
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